En mi cumpleaños 33 una amiga me regaló un pequeño Ganesha que había traído desde la India, lo puse en uno de mis árboles y aquel paisaje en miniatura originó la idea de compartir con los demás el maravilloso y apasionante mundo del bonsái. Ganesha, dios de los nuevos caminos y de la prosperidad, tiene un lugar especial en nuestro vivero
En mi cumpleaños 33 una amiga me regaló un pequeño Ganesha que había traído desde la India, lo puse en uno de mis árboles y aquel paisaje en miniatura originó la idea de compartir con los demás el maravilloso y apasionante mundo del bonsái. Ganesha, dios de los nuevos caminos y de la prosperidad, tiene un lugar especial en nuestro vivero. Muchos visitantes se acercan a la gran estatua que lo representa para pedirle fuerza en sus propósitos, y quienes lo hacen sienten su poderosa energía.
Alquilé la terraza del edificio en el que vivía para montar el vivero, luego moví los arbolitos al patio de una casa en Pasadena y hoy decidí mudarme a una casa en el Refugio Alto para vivir con ellos y crear el jardín japonés que siempre soñé para Bogotá.
Soy un abogado rosarista que reparte su tiempo entre la oficina y el cultivo de bonsái, un oficio pone el pan sobre la mesa y el otro llena de significado mi vida, Miniaturasbonsai es un camino de realización que comparto con ustedes hace 8 años.
Si bien los chinos descubren estos árboles miniatura en sus montañas, son los monjes budistas japoneses quienes convierten su cultivo en un arte sofisticado y sacralizado. Creen que representan la creación divina en su totalidad, poderoso símbolo en el cual meditan para establecer un puente con lo divino, los consideran guardianes-protect
Si bien los chinos descubren estos árboles miniatura en sus montañas, son los monjes budistas japoneses quienes convierten su cultivo en un arte sofisticado y sacralizado. Creen que representan la creación divina en su totalidad, poderoso símbolo en el cual meditan para establecer un puente con lo divino, los consideran guardianes-protectores y por esta razón los ubican en las entradas o balcones de los templos y casas, como custodios de los umbrales; siendo cultivador, puedo asegurar que son el arquetipo más revelador de la naturaleza, más que su valor estético debería interesarnos su contenido metafísico.
Recuperación, poda, alambrado,
diseño, cambio de sustrato.
Cuando viajes, nosotros
cuidaremos en el vivero de tus
arbolitos el tiempo que necesites.
Por un precio muy razonable puedes llevarte uno de nuestros bonsáis… o, si lo prefieres, ¡todos!
Cultivamos nuestros árboles en una finca cerca a Bogotá, tenemos más de 15.000 árboles y 1.000 exhibidos en el vivero.
Ofrecemos una gran cantidad de figuras decorativas para tus arbolitos.
Un bonsái te acompañará por siempre y es un regalo inolvidable, símbolo de eternidad que trasciende nuestra existencia en el mundo.
Amamos recibir visitas. Cuando vengas, descubrirás algo mágico: no eres tú quien escoge al bonsái… ¡es el bonsái quien te escoge a ti!
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